Asistí el sábado a una boda de unos parientes, a la de mi mejor amigo y quiero dejar constancia como homenaje estas líneas para sus padres, para ellos mismos, o sea, los novios, ya casados. Jóvenes, simpáticos y guapos.
En ella (la boda) se confunde un adiós y un hasta luego, una tristeza, porque dejan de ser solteros y una alegría por lo contrario, porque ya están recien casados. Todo enamorado quiere más tarde o más temprano vivir con la persona que ama, y como un don de la naturaleza, dar el resultado de ese amor en forma de hijos.
Lo interesante es vivir siempre enamorado o enamorada, porque alarga la vida de los dos y la satisfacción de los hijos, que viven con las risitas al ver que los padres se quieren.
Vaya mi homenaje, porque a pesar de todo lo dicho, el amor es lo más importante. Felicidades.